sábado, 3 de febrero de 2018

ENTREVISTA. Las Empresas de Producción Social, una iniciativa que adelanta el PFG en Comunicación Social


20 de noviembre de 2017
[Realizada en el Estudio de Televisión del PFG Comunicación Social]

Entrevistado: Prof. José Javier León – Coordinador de Proyecto de Comunicación Social Universidad Bolivariana de Venezuela.
Entrevistadora: Isis Requena – Estudiante.

1-    ¿Cómo define usted una Empresa de Producción Social?

-       La verdad yo no hago la definición, existe una definición de Empresas de Producción Social que tiene rato tratando de introducirse en esta dinámica económica que se está impulsando en el país. Las empresas de Producción Social son empresas que tienen una carga, valga la redundancia, social porque buscan que la población, los sujetos económicos, participen activamente en la producción. Procura que las personas logren organizarse para producir y para trabajar con el interés de transformar una realidad comunitaria o comunal con incidencia en la economía local y en la economía regional y de allí ir escalando a medida que el emprendimiento productivo vaya creciendo, pero siempre considerando no el interés crematístico, no el interés por el dinero, por el lucro, sino por el desarrollo, por la transformación que impacte de manera positiva a la sociedad.

2-    ¿Qué lo impulsó a usted a promover esta iniciativa?

-       Es una iniciativa que trata de comulgar con los intereses del Estado bolivariano porque necesita un cambio, un viraje en la dinámica económica. Nosotros necesitamos incluso desde salvar el planeta hasta salvar el país, se necesita romper con las fórmulas de producción explotadoras del capitalismo; que explota al ser humano, que explota al ambiente, explota los recursos de manera insensata, de manera irracional. La producción social implica verdaderamente racionalizar desde la perspectiva humana la economía, la producción. Entonces la Universidad Bolivariana de Venezuela lógicamente está enamorada de ese proyecto bolivariano, de ese proyecto de desarrollo donde lo social es lo primero, donde lo humano es lo primero, de manera que es natural que la Universidad Bolivariana busque herramientas, mecanismos y estrategias para conectarse con ese hacer de una nueva economía. Sin embargo, es complicado porque las universidades históricamente han estado desconectadas de lo económico, sobre todo de la producción. Hubo una suerte de división entre la teoría y la práctica por un lado y por otro la investigación científica y el trabajo. Lo que he creído, y es mi área de investigación más cercana, es que el conocimiento debe aliarse de manera estratégica, de manera vertebral con el trabajo. Que el conocimiento y el trabajo avancen de la mano y esa no es una idea mía, esa es una idea robinsoniana, es una idea de Simón Rodríguez que he tratado de parafrasear, de estudiarlo, de leerlo y entender algunos planteamientos básicos. Por ejemplo, esa idea que él manejaba, Simón Rodríguez, de la toparquía, el gobierno del lugar, el gobierno del sitio, la administración y la economía del lugar son fundamentales para nosotros, para los bolivarianos, para los seguidores de Simón Rodríguez y, para la Universidad Bolivariana que tiene una idea de territorialización, es esencial.

3-    ¿Quiénes pueden ser parte de una Empresa de Producción Social?

-       Tienen que formar parte acá los estudiantes. Nosotros debemos resolver el problema del trabajo de los estudiantes, de los estudiantes y futuros egresados, la verdad 4 años son nada. Aquí necesitamos verdaderamente que los estudiantes no salten al vacío una vez que se gradúen, sino que haya espacios de trabajo y, por cierto, el presidente Chávez en su momento en el año 2011, redactó, yo me he hecho la idea de que la redactó de puño y letra porque es verdaderamente de avanzada, una resolución que salió publicada en Gaceta, una estrategia donde él hablaba de la universidad productiva. En esa resolución se describe perfectamente con claridad meridiana la estrategia de cómo las universidades pueden conectarse con el trabajo productivo y cómo los estudiantes, las comunidades y la universidad como un todo, desarrollando proyectos productivos pueden impactar y crear espacios de trabajo nuevo, novedoso. Eso para mí es revelador, fue revelador en el momento en el que me encontré con esa gaceta que estaba perdida, traspapelada; yo me puse a indagar y en el año 2011 se hicieron reuniones en las universidades en torno a eso que se estaba mandando en esa gaceta, pero las reuniones no pasaron del 2011 y fue algo así como una estrategia de paso. Yo creo que hay que retomarla, retomar el espíritu de la gaceta, lo que mandaba específicamente que era crear una institución que no viene al caso describir con detalle pero el espíritu sí, hay que retomarlo y el espíritu es la universidad trabajando para la producción con estudiantes, comunidades organizadas en proyectos productivos y yo creo que faltaría un tercer momento, que digo que es un tercer momento porque el primero sería con los estudiantes; segundo el trabajo productivo con las comunidades pero el tercero es que los estudiantes asuman la dirección de los emprendimientos productivos ya como profesionales. Entonces durante toda la formación, o sea los 4 años, los estudiantes junto a las comunidades deben organizarse en emprendimientos productivo, o sea, en empresas que pueden ser empresas de producción social o en cualquier otro emprendimiento como están diseñados en nuestro código de comercio y nuestras leyes, y en especial, las leyes del Poder Popular.

4-    Entonces, como Coordinador de Proyectos de Comunicación Social, ¿Cuáles serían los alcances que podría tener una Empresa de Producción Social conformada por estudiantes?

-       El primer alcance es que los estudiantes ya profesionales tengan un espacio de trabajo diseñado según su área de conocimiento, según sus saberes, según sus talentos. Es un gran alcance, o sea, si logramos nosotros destrabar el asunto del trabajo, del empleo y creamos condiciones de trabajo digno construidas con autonomía, con independencia, con soberanía, además desanclados del capitalismo porque, hasta ahora, hemos producido profesionales que dependen del mercado de trabajo. Y el mercado de trabajo es eso, un mercado. Que como todo mercado trabaja con oferta y demanda y trabaja sacándole el jugo a la escasez, por eso el desempleo. Entonces nosotros debemos destrabarnos, salirnos de esa lógica y crear nuestra propia lógica, una lógica bolivariana, una lógica socialista en la que todos podamos trabajar. Entonces, si los estudiantes se organizan para producir pueden crear emprendimientos, empresas que logren generar productos que se inscriban dentro de los circuitos económicos que el país reclama, porque nosotros necesitamos una comunicación producida por profesionales con una nueva ética, con una nueva visión que son ustedes, el producto de ustedes se necesita, la sociedad lo requiere y eso necesita aplicación de ciencia y tecnología, de conocimiento y de las estrategias de un mercado distinto, en todo caso, un espacio de intercambio productivo donde estudiantes y luego profesionales, comunidades y las empresas que están aliadas al modelo económico puedan crear un sistema donde haya colaboración, solidaridad pero sobre todo formas distintas de trabajar.

5-    Entonces, ¿El emprendimiento productivo puede generar ganancias?

-       Por supuesto, es necesario que así sea. Yo cuando hablo de esto con los estudiantes lo que creo que es necesario, es que puedan generar emprendimiento productivo rentable, o sea, que puedan generar ganancias, que puedan generar sustentabilidad, en todo caso que sean sustentables. Entonces una de las estrategias que yo he venido trabajando con los estudiantes es que necesitamos estudiar la factibilidad de los proyectos y existen estudios que las empresas aplican para poder demostrar su sustentabilidad y su rentabilidad. Nosotros necesitamos hacer esos estudios de factibilidad con los proyectos nuestros, por ejemplo con los proyectos de productores audiovisuales, nosotros debemos demostrar que una productora audiovisual como la que soñamos es rentable, es sustentable. Nosotros debemos aspirar como universidad, como PFG, como productores audiovisuales debemos aspirar al financiamiento vía banco, pero necesitamos para ese financiamiento organización; un sujeto productivo que esté organizado. Y, además, que demostremos que ese dinero no va a caer en un saco roto, que es rentable, que es sustentable en el idioma en el que hablan los bancos, lo que debe ocurrir es que debemos demostrar que eso es posible. Yo he trabajado en la productora audiovisual, en ese proyecto de productoras y hay una serie de proyectos que se pueden emprender con un criterio de sustentabilidad económica. Todo eso está por construirse, yo he avanzado en algunas ideas, pero lo que más quiero es que cosas como estas se den [entrevistas como estas, por ejemplo], estas oportunidades de decirlo, de manifestarlo, porque hay que decirlo por todas las vías. Hay que crear seminarios, yo he pensado que nosotros tenemos que generar un diplomado en economía productiva, porque ¿Cómo se maneja un emprendimiento productivo?, eso no se ve en ninguna parte del PFG, no hay espacios para la economía productiva.  Yo creo que hay que insertar esos temas en el PFG dentro de la educación formal y que no sea una cosa extra cátedra sino al contrario, que sea vertebral y que Proyecto sea la unidad que articule todo esto.

6-    Ya para finalizar profesor ¿Qué experiencias ha tenido usted dentro del ámbito del emprendimiento productivo?

-       En el área de la comunicación hemos participado en algunos proyectos interesantes. Uno fue la creación de un Centro de Producción Audiovisual y Radial que funcionó en la comunidad de San Jacinto aquí en Maracaibo donde se formaron 5 comunidades, personas que habitan en comunidades, 3 indígenas y 2 urbanas. Ese proyecto recibió financiamiento de CONATEL y sirvió para crear una plataforma muy interesante. Salieron de allí grandes producciones y pequeñas también, humildes, pero también grandes producciones; un corto, una película producida enteramente por indígenas, por wayus que para mí fue todo un reto, fue muy importante. Un corto que se produjo con esos equipos financiados por CONATEL recibió creo que más de 5 premios nacionales y participó en festivales, fue un total éxito. Esos equipos todavía los tenemos, nosotros nos organizamos como cooperativa en el año 2006, estaba naciendo la UBV y estuvimos por 5 años trabajando con comunidades y con sectores urbanos. De allí surgió una experiencia que me permitió en el año 2013 participar con un grupo de estudiantes en la conformación de una Unidad de Producción también que se llamó CCPA (Centro Comunitario de Producción Audiovisual) que funcionó en Cuatricentenario, eso nos permitió organizarnos, solicitar un crédito a FONACIT que nos permitió comprar unas cámaras, comprar una editora, comprar algunas cosas y durante un año estudiantes recibieron formación, un estudiante recibió un estipendio económico que era importante para su momento y se produjeron unas cosas bien interesantes también. La idea allí casi que cuaja hacia la creación de la empresa pero por asuntos de tiempo, los muchachos se graduaron, se dispersaron, sin embargo 2 continuaron trabajando, todavía trabajan y tienen acceso a los equipos que quedaron en un consejo comunal, se hizo todo bastante bien. Fue un equipo muy responsable, con mucho talento y egresado de la UBV. Luego de ese proceso empecé con otro grupo de proyecto, pero a construir desde las bases, estamos en un proceso de aprender a hacer televisión, aprender a hacer radio, aprender a hacer comunicación para las redes. Tenemos previsto que para el próximo año podamos arrancar con el diseño de la empresa y el diseño de la factibilidad económica, o sea, cómo es que creemos que se va a sostener esa empresa. En eso estamos en medio de todas estas dificultades que hace que los estudiantes abandonen o tengan diversos problemas, pero yo creo que este es el momento de las oportunidades porque en medio de la necesidad hay que empezar a crear, hay que inventar y este es el momento.